Sí, esta vez han sido monjas. Ellas. Y no, no estamos hablando de abusos lésbicos, como si de un blandiporno, subgénero "mujeres encerradas", subespecie "internado para señoritas" se tratase, sino que, por lo que se lee en la noticia, abusaban de chicos.
Las denuncias se remontan a los años cincuenta y sesenta, aunque parece ser que las hay más recientes, hasta ya entrados los noventa. Y otro caso más que viene a sumarse a los más de 500 reconocidos por la propia iglesia belga el año pasado. Y una de dos, o en Bélgica al agua le echan algo que hace que vayan todo el día como muy salidos, o una simple transposición estadística de casos a la muy nacionalcatólica España da como miedo.
Claro que también explicaría muchas cosas sobre el paisanaje...
En fin, que no voy a poner la frase clásica en estas ocasiones, porque en la noticia no hay nombres propios y entonces no tiene gracia. Y que para todo lo demás, lo que dice hoy Otto. Que de vez en cuando incluso dice cosas con sentido...
8 comentarios:
¿Tú quieres que yo me ponga a largar, y me digan que no hay cojones a meterme con mahoma, no? :´)
Si a estas alturas del curso me enterase que tu tienes cojones, Pitu, me llevaría una sorpresa de... bueno, sí, de cojones. Nunca mejor dicho.
¿Va en serio? De piedra... Y gracias por el enlace a Otto, no lo conocía.
A estas alturas no sorprende...
Eastriver, tan en serio como pueda ir una noticia del 20 minutos. Pero vamos, que si non é vero...
Sonia, pues no.
Serás puerca! xD
Activa lo de la versión para móviles, anda...!
Seg.
Seré...
Cómo se hace lo de los móviles?
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