La prerrogativa del bufón

Por lo que leo por ahí, la clase política catalana (que no se por qué los llaman así, cuando si algo no tienen, precisamente, es clase) anda un poco revolucionada. Y no hablo de que el montaje de Ciutadanos se esté yendo al traste a las primeras de cambio (no se pueden poner tantas primmas donnas en un único teatro, almas de cántaro), de la guerra civil declarada en el seno de ERC a raíz de los resultados de las municipales, de la larga agonía de la sucursal del PP en catalufia (de derrota en derrota hasta la debacle final, y yo que me alegro), de que vuelen misiles tierra-tierra entre Convergència y Unió (ambas Democràtiques de Catalunya), de que el PSC parezca un hormiguero al que le han tapado el agujero o de que Iniciativa esté como siempre (que es mucho mejor que Izquierda Unida a nivel estatal, pero mucho peor de lo que sería deseable). Al fin y al cabo, eso son menudencias. El tema que ha puesto nerviosos a los políticos catalanes es un programa de televisión. De humor.

No se si les suena Polònia. Es un programa de El Terrat (la productora de Buenafuente), semanal, donde se hacen gags y sketches de actualidad política, bastante sangrante, todo sea dicho, y bastante divertido. Vamos, un Spitting Image (y hago la referencia a los ingleses, y no a los guiñoles del plus, porque me parece recordar que estos últimos son bastante menos burros y andan con bastante más miramientos que los otros) pero con actores de carne y hueso, en lugar de muñecos. Curiosamente, esta misma gente tuvieron un programa en Antena 3, creo, con el mismo formato, que duró como cuatro emisiones porque la audiencia no acompañaba. Polònia, en cambio, es lider de audiencia. Deben ser cosas del fet diferèncial. En cualquier caso, si por algo se han distinguido es porque reparten palos a tort i a dret, y no dejan títere con cabeza de cualquier personaje político nacional del Rey (inclusive) hacia abajo, incluyendo en el saco a algunos intocables internacionales (como el Papa). Les pongo algunos tutubos, para que se situen (el segundo es sólo en catalán, el tercero sólo en castellano -e impagable-, y los otros van mezclando idiomas al buen tuntún):






Bueno, para que se hagan una idea. Si quieren más, vayan tirando de links de youtube. Ah, y supongo que a estas alturas del curso no necesitarán que le explique de donde viene lo de "Polònia", no? Pues eso...

En fin, que me pierdo. Que parece ser que hay políticos (encabezados por Mas, el de CiU) que consideran que la coña ya pasa de castaño oscuro, y que se están cabreando con lo de que unos humoristas los satiricen constantemente. E incluso hay sociólogos que dicen que programas de este tipo son responsables del desapego de la sociedad por la política y de las altas cotas de astencionismo electoral.

Que tócate los huevos.

Porque ya no es sólo que olviden aquello de las sátiras de Horacio, "qué nos impide decir la verdad riendo" (y manda cojones que esto tenga que reivindicarlo yo, pero bueno) o la prerrogativa del bufón (y la del niño, y la del loco y la del borracho), que es decirle a la cara al Emperador que está desnudo. Es que se olvidan incluso del "que hablen de mí, aunque sea mal". Que ya tiene delito.

Vamos a ver, los políticos están ahí para que se rían de ellos. Les viene en el sueldo. Y cuando encima nos encontramos con que los políticos catalanes en particular y españoles en general parecen acabados de salir de un sainete barato, como es el caso, más.

Y la verdad, ya no sé que más quería decir con esto. Disfruten con los vídeos, anda.

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