A finales de Agosto de 2004, en los medios
informativos deformativos de este país
se montó un cierto pitote cuando a la la Concejalía de la Mujer y de los Derechos Civiles del Ayuntamiento de Barcelona se le ocurrió editar un folleto donde se limitaban a recordar que el delito de escándalo público hace mucho tiempo que dejó de existir, y que el Código Penal vigente no recoge en ningún punto que la desnudez pública sea un delito.
Ha pasado algo más de un lustro, y salvo el señor
Esteban (en la foto, tomando el fresco a la altura de la iglesia de Belén) y otros dos o tres personajes (que, además, son siempre los mismos), lo de ver gente en bolas andando por las calles de Barcelona como que no es lo habitual, para qué engañarnos. Para variar en su costumbre, las predicciónes apocalípticas de todólogos, opinadores y serios periodistas de que esta ciudad se iba a convertir en otra Gomorra quedaron en el más absoluto de los descréditos, porque, para variar en su costumbre, eran una gilipollez como una casa.

Inciso: la ley es la que es y dice lo que dice, pero de poco sirve cuando uno se encuentra con jueces meapilas como el que en Octubre del año pasado condenó al señor
Esteban a
80 eypos de multa por "criterios sanitarios, estéticos, morales y religiosos", así, con dos cojones. El talibancillo este, su señoría
Emili Soler, magistrado del Juzgado de Instrucción número 27 de Barcelona, se ve que no se ha enterado de que los criterios religiosos no están en el código penal vigente, los criterios morales no son objetivos (y él no es quién para imponer los suyos sobre los de los demás) y los criterios estéticos... en fin. Que si nos vamos a poner a condenar a gente por criterios estéticos, por mis muertos que me saco las oposiciones a juez pero ya. Que me ví a de poné morao. Desconozco si la sentencia fue recurrida (en cualquier caso, no logró su objetivo, el señor
Esteban sigue paseando su Príncipe Alberto por las Ramblas tan pancho), pero tengo que decir que no se por qué cuando me he encontrado con la noticia buscando la foto me ha venido a la cabeza
el talibanazo del juez Carlos Divar y el tontolapolla de
Zapatero que lo puso de presidente del Consejo General del Poder Judicial con el historial que ya tenía.
Les cuento esto porque, como sin duda se habrán enterado, las mismas hordas de beaturrones, siempre preocupados por la moral y las buenas costumbres (de los demás), han vuelto a poner el grito en el cielo, puntuales como un reloj, porque en Barcelona, especialmente en las Ramblas y los barrios de la costa hay gente que va en bañador por la calle.
Sí, como leen. Han tenido que esperar al verano de 2009 para darse cuenta de que la gente, especialmente los turistas, pero también no pocos autóctonos, cuando van y vuelven de la playa van en bañador, y muchas veces sin camiseta. Por las Ramblas, por todo el Raval, por toda la Ribera, por el Gótico, por la Barceloneta e incluso por el Poble Nou.
COMO SI NO HUBIERA PASADO TODA LA VIDA, VAMOS.Tantos gilipollas y tan pocas balas...
Al parecer, la cosa ha surgido de la asociación de propietarios de bares de esas zonas, que están horrorizados porque eso "da mala imagen". Olvidando por un momento que lo que REALMENTE da mala imagen de la ciudad es los atracos a mano armada que hacen en muchos de esos bares, por no hablar de la calidad de lo que sirven o su estado de limpieza en general (y digo en general, que si hablamos en concreto de los baños podemos acabar echando la pota aquí todos), la cosa me suena muy extraña porque, si no recuerdo mal (y corríjanme si me equivoco), en cualquier bar se pueden negar a atenderte, e incluso echarte, si vistes de manera no adecuada (para los estándares de ese bar, se entiende). Y sobretodo me parece muy extraño porque, salvo en terrazas MUY de primera línea de mar es muy raro ver a alguien descamisao (en interiores no recuerdo haberlo visto nunca), que la gente cuando se sienta normalmente se pone la camisa, y, en cualquier caso, nunca hasta el momento le habían hecho el más mínimo asco al tema.
Pero nada, las hordas bárbaras de periolistos, todólogos y opinadores varios (aunque de poco variado perfil ideológico) han entrado a degüello con el tema, que si es una indignidad y que si da mala imagen y que si el abuelo fuma y que si la abuela bebe. Llegando a extremos puramente esperpénticos cuando aparece un tal
Josemi, famoso por salir en programas de los que se dedican a poner cortes de otros programas, en cortes del programa de
Cristina Tárrega (donde al parecer se dedica a... a... a hacer la loca. Alguien que haya visto el programa de la
Tárrega puede decir si hace algo más? Gracias) diciendo pestes de que la gente vaya sin camiseta porque es "antiestético".
Digo que es esperpéntico porque que este señor se queje de que otros son "antiestéticos" tiene su miga...

sobretodo teniendo en cuenta que lo mejor que se puede decir de él es que cada vez que lo ves (y no me atrevo a poner un vídeo, que cuando habla es aún peor) te sangran los ojos. Y el modelito de la foto es discreto, elegante y funcional, para lo que acostumbra. Hablabamos de buen gusto, no?
Y mientras tanto, la playa de la Mar Bella cada vez es menos nudista...