Vivo sin vivir en mi

Y no es que me haya dado el arrebato místico

A mi me diran lo que quieran, pero la de la estatua tiene cara de estar corriéndose viva, no de estar viendo a dios
ni que me haya hinchado a ron hasta echar los higadillos por las esquinas (aunque ahora mismo no será por falta de ganas, la verdad)

Yo casi como que veo más de éxtasis esto, la verdad
Sino que estoy que no se si ponerme a servir o meter criada. Porque por una parte, en el puto curso ahora el profesor ha decidido llevarnos el viernes de salida a Salt (que queda, poco más o menos, en el quinto coño), en un horario distinto al del curso (organizate la vida, venga!) y, por supuesto, pagándonos nosotros el tren (que no es que sea tanto, pero es. Que se supone que los que estamos allí es porque estamos en paro). Todo lo cual no sería tan grave si se nos hubiese informado al matricularnos... pero como que no.

Y por otra, resulta que nuestra flamante alcaldesa-no-electa tiene un blog, que desde junio no se había actualizado más que una vez hasta que en la ejecutiva del PSC decidieron que iba a ser alcaldesa (obviamente, se trata de una mujer con mucho que contar y una intensísima actividad). Cosa en que en un blog de un político tampoco sería tan extraño, pero es que lleva más de catorce horas un comentario mío ahí, esperando que la moderación le de paso (o no), y me está entrando el miedo que, ahora que ya tiene el bastón de mando, no le de por volver a entrar ahí hasta las próximas elecciones y mi comentario se queda ahí, en la Zona Fantasma, muerto de frío. Y me da penita del pobre comentario, qué quieren!

Que vamos, que casi estoy por unirme a este coro. Total, es una de las pocas cosas que podría hacer para que mi vida fuese más surrealista aún...


EDIT: El vídeo lo saqué de un Twitter. No recuerdo de quién. Vale, Züber?

EDIT 2: A más de 24 horas, el comentario sigue sin salir de moderación.