Estimados señores de la CONCAPA

(dos puntos)

Recientemente he venido observando una gran afluencia de visitas a este, mi blog (y el de otra mucha gente, pero, desde luego, no el suyo) buscando información sobre su sect... organización. En qué estaría yo pensando. Dichas visitas se dispararon alegremente el pasado día lunes 18, en el que, de hacer caso a lo que me indica Statcounter, llegaron a esta impía casa nada más y nada menos que una visita buscando "concapa badajoz", dos "concapa badajoz 2007", cuatro "república de barataria concapa badajoz 2007" (y aquí ya me lo empiezo a tomar como algo personal), y diez buscando "site:republicadebarataria.blogspot.com cartas a la republica de barataria 2007 concapa". Un total de diecisiete (17) búsquedas en un sólo día, a la que añadir las cuatro que buscando "site:republicadebarataria.blogspot.com cartas a la republica de barataria 2007 concapa han llegado hoy. Un total de 21 visitas. Que para la gente de elmundo.es, clarín.com o escolar.net deben ser migajas, pero en este humilde blog personal ya les digo yo que es mucho.

Podría creerme que las primeras son meras casualidades, que alguien iba buscando información sobre la Confederación Católica de Padres de Alumnos (que, si no recuerdo mal, es lo que quiere decir CONCAPA), encontró el link y entró a ver qué se encontraba. Pero claro, cuando ya empiezan a buscar CONCAPA y el nombre de este humilde blog, o directamente usan la herramienta de búsqueda en blogs de Google para buscar en este blog cosas sobre la CONCAPA, pues uno piensa mal y le da la impresión de que hay algo más. Que, o lo que encontraron les gustó mucho, o bien que lo que encontraron no les gustó nada y se van pasando el link para indignarse mucho en rebaño, que es algo que, por lo que se, a ustedes les gusta mucho. Y sí, el término "rebaño" está usado a tan mala fe como sea posible.

Como sea que aquí el abajofirmante es de profesión científico, y como tal es un empirista redomado, me he tomado la molestia de hacer la misma búsqueda para ver qué es lo que se habían encontrado. Más que nada porque, sinceramente, no soy consciente de haberme rebajado nunca tanto como para ensuciar este blog mentándoles. Pero como ustedes sin duda saben, la carne es débil y la memoria frágil, y parece ser que como mínimo en dos ocasiones sucumbí a las tentaciones del Maligno y hable de la CONCAPA. Concretamente, aquí y aquí. Sin contar que ya había recibido más visitas en el último mes buscando información de la CONCAPA, que aparecían reflejadas en pasados posts de la serie "llegaron a esta santa casa buscando".

Y, releyéndome esas entradas en diagonal (que ya tienen un tiempo, sobretodo la primera), me imagino que, muy felices, lo que se dice muy felices, no habrán quedado ustedes con los calificativos que les dirijo a ustedes, los de la CONCAPA (por cierto, que por si alguien no se ha dado cuenta, estoy repitiendo muchas veces el acrónimo CONCAPA para que en google salga más alto y ahorrarles trabajo en próximas visitas, y asegurarme, en la medida de lo posible, de que lean esta nota). Entre otras cosas, porque les llamo "asociación de malhechores", anormales (mediante una perífrasis, les opongo a las familias normales"), indecentes, golfos apandadores, talibanes (también perifrásticamente... ahora que caigo... saben lo que es una perífrasis, verdad?), gentuza, maleducados (faltos de respeto, para ser más exactos), e incluso les comparo con los Jinetes del Apocalipsis. Esto, insisto, leyendo en diagonal. Si entrase más a fondo, seguro que encontraría que les dirigí algún epíteto más, señores de la CONCAPA. Yo es que cuando me pongo, me pongo.

Lo divertido del tema? Que el único de estos adjetivos (descriptivos, que no injuriantes) que me arrepiento de haber puesto, y que a día de hoy no sostendría, es el último. El de la comparación con los Jinetes del Apocalipsis. Porque es completamente injusto.

Ustedes, señores de la CONCAPA, son mucho peores. Al fin y al cabo, los Jinetes no son más que personificaciones antropomórficas de los Grandes Males de la humanidad. El Hambre, la Peste, la Guerra, la Muerte. No tienen culpa ni responsabilidad en ser lo que son ni hacer lo que hacen. En cambio, ustedes, señores de la CONCAPA, y todos los demás mermados mentales que piensan (soy consciente de que es retorcer el término hasta el punto de ruptura, pero me parece que el castellano no tiene un término adecuado para definir los procesos mentales de las amebas, que sería lo más comparable) como ustedes (y me da igual al dios que digan adorar, eso sí, pasándose lo que dicen sus Textos sagrados por el forro de los cojones cuando les viene bien, que en eso también son todos iguales) generan el hambre (impidiendo una adecuada planificación familiar, que es pecado, y llevando con ello a la superpoblación y la miseria), difunden la peste (poniendo tantas trabas como son capaces a una correcta y científica educación sexual y anatemizando el uso del preservativo, la única cosa, material o no, que ha demostrado ser efectiva para evitar la proliferación de enfermedades venéreas), promueven la guerra (y me niego a estas alturas del curso a poner aquí una lista de guerras y matanzas, pasadas o actuales, realizadas por cuestiones religiosas y bendecidas por las curias correspondientes) y nos llevan, en definitiva, a la muerte.

Por su culpa, por su culpa, por su gran culpa.

Y en cuanto a todo lo demás... bueno, señores de la CONCAPA, les remito a las entradas enlazadas más arriba. Que allí ya más o menos lo explicaba todo, y estaba todo en su contexto. Y, por favor, les ruego encarecidamente que si tienen algo que decirme en su defensa, o que echarme en cara, usen los comentarios. Tranquilos, que no me como a nadie (no sin intenciones lascivas, al menos), que aquí ha posteado hasta Daniel Vicente Carrillo, alias Irich (y a este lo pongo porque se que también gusta de buscarse a sí mismo por internet y de vez en cuando deja alguna cagadita por aquí), que es de su cuerda, y se le han ido rebatiendo sus argumentos uno por uno, sin que nadie saliese herido.

Atentamente:

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