En bolas ya! (y con el cirio al aire)

Me van a permitir que, antes de pasar a lo que indica el título (les dije que hoy hablaría de sexo, y voy a cumplir) les haga partícipes de unas pequeñas cuentas estadísticas que ha tenido a bien hacer el maese Orlando en chez Escolar:

Según el barómetro del CIS de Noviembre de 2007, sobre 2462 entrevistas (para un nivel de confianza del 95.5% y con un margen de error del 2%), se definen creyentes el 78% de los encuestados, de los cuales acuden a los oficios religiosos casi todos los domingos y fiestas de guardar (o más a menudo) el 16.9%. Eso significa que acuden al templo un 13.27% de la población, dos puntos arriba o abajo.

Suponiendo el mejor de los casos para la iglesia (sesgo superior) sería un 15.27%, con lo cual, dentro del margen de confianza del 95.5%, y para una población española de 45 millones de personas, habiendo hecho TODOS los redondeos por exceso y contando a todos los encuestados como católicos (cosa que NO se ajusta a la realidad en absoluto, hay más confesiones en España), el resultado es que acuden a misa (y por tanto cumplen con los preceptos de su religión, y pueden en derecho ser considerados "fieles") seis millones novecientas mil personas. Es decir, un 15.3% de la población. Y eso, insisto, haciendo todos los redondeos posibles y considerando que en españa no hay más religiones que la católica.

Así que la próxima vez que les vengan con lo de "la gran mayoría de católicos" que hay en España, les pueden hacer una pedorreta y reírse en su cara. Porque es una mentira del tamaño de la Catedral de Sevilla.

Y ahora vamos a lo que les interesa. Pero déjenme que antes les ponga en antecedentes. La cosa es que los contadores de visitas son un invento fantástico, fuente de inagotables maravillas. Y en esto, que, el otro día, en medio de el olor a sudor rancio, pis y semen retenido que han estado dejando nuestros queridos obispos por las españas todas, me encontré con que alguien había llegado a esta santa casa buscando "cirios bautismales desnudos". Ya me había hecho a la idea de que gente con espíritu onanista y poco dominio de Google llegase hasta aquí buscando las más variadas perversiones sexuales (cosa que no acabo de entender, tampoco es que haya hablado nunca tanto de sexo), personajes de la más diversa calaña desnudos o, simplemente, "xexo" (sí, "sexo" no, "xexo"). Pero esto de los "cirios bautismales" lo encontré, o una parafilia demasiado refinada para mi conocimiento (lo cual sería del todo inadmisible, uno se precia de ser un libertino y un libertino como dios manda tiene que estar enterado de todo lo que se cuece), o bien una forma excesivamente barroca de referirse al miembro viril, vulgo polla.

Así que me picó la curiosidad, y armado de una sonrisa sardónica en los labios, me sumergí en las procelosas aguas de internet. Y me encontré con esto:

Como pueden ver, lo del título es LITERAL, no se admiten devoluciones

Un cirio que, al parecer, está en la iglesia de María Magdalena de Altötting (Alemania). Y que, en sí, no da para gran comentario: Dos personajes de sexo diverso que se elevan, liberados de unas cadenas y desnudos, hacia un tercer personaje, también desnudo pero con un braghettone, barbudo y portando un estandarte, que no es dificil identificar con la representación icónica del Cristo, que flota ante un arco iris, que es un símbolo existente dentro del imaginario judeocristiano como señal del cumplimiento de una promesa (por aquello de que Dios lo puso en el cielo para indicar a Noé que no volvería a enviar otro diluvio), y que un pagano vocacional como yo enlaza directamente con las representaciones icónicas de todos los avatares solares que en el mundo han sido y con el camino al Paraíso en más de una y más de dos religiones. Bueno, y con la olla de oro en su extremo, claro. Pero vamos, nada que se salga de la más estricta, ortodoxa y clásica iconografía cristiana, incluyendo el hecho que las almas liberadas estén desnudas. Sinceramente, no es algo que me hubiese girado dos veces a mirar.

Pero lo que ya me tocó un poco la moral es que el redactor de la noticia (que yo vi aquí, aunque por lo que parece se limitaron a copiarla tal cual de aquí) dijese, así con toda la alegría del mundo, que la iglesia donde se encuentra (recordemos, consagrada a la Magdalena) era un "templo mariano". Los templos marianos son los consagrados a María de Jerusalem, la Madre, no a María de Magdala, la Doncella. A Láquesis, no a Cloto. El por qué a Eva, a la Anciana, a Átropos, no se le dedican templos en el cristianismo es tema para otro debate, pero mucha confianza no deben tener en la otra vida cuando la temen tanto.

El caso es que me dirigía yo, todo contento y feliz y canturrentante a avisarles en los comentarios de tamaño error (y, por qué no decirlo, a reírme un poco en su cara) cuando se me heló la sonrisa en los labios.

Y acto seguido proferí una carcajada.

Me había metido en un blog de Lefevristas! Y del ala dura, además!

Y bueno, vergüenza me da decirlo, pero después de leerles reconozco que incluso me he reconciliado un poco con la curia católica de aquí. Porque en comparación son unos rojazos (y, según estos talibanes de vía estrecha, unos masones), pero sobretodo porque no son unos palurdos incapaces de escribir tres palabras sin hacer ocho faltas de ortografía y que reconocen no saber si los braghettones de la Capilla Sixtina los puso Buonarroti o no.

Que quieran que no, ya es un qué.

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